A comienzos de Marzo de 1938, las tropas de Franco emprendieron la gran ofensiva con la que lograrían tomar la parte oriental de Aragón, que permanecía todavía en manos republicanas, llegando finalmente hasta el Mediterráneo y aislando militarmente a Cataluña. El avance fue imparable y Caspe caería pocas jornadas después, concretamente, el 17 de Marzo.
Con la llegada de las tropas franquistas se rompía cualquier vinculación con las experiencias revolucionarias que habían tenido lugar en los meses anteriores. El franquismo se impondría a partir de entonces en todos los ámbitos de la sociedad caspolina.
Lo que hoy mostramos son dos instantáneas tomadas en ese convulso periodo de profundos cambios. La primera fue tomada todavía en plena contienda, apenas cuatro meses después de la batalla a la que nos referíamos antes. Se trata de una fotografía captada el 25 de Julio de 1938 en la que aparece un grupo de niños que acaba de recibir la primera comunión. Aunque la imagen está tomada bajo la sombra de un gran albaricoquero en el patio del Colegio de Las Anas, el evento religioso tuvo lugar en la Iglesia de Santa Lucía, la única que se conservaba en buenas condiciones. La guerra había impedido que en 1937 tuvieran lugar las comuniones correspondientes, así que en esta ocasión se aprovechó para que comulgaran quienes no habían podido hacerlo.
Hay que mencionar, además, que el mismo día en el que fue tomada la imagen se produjo un curioso suceso. Por la tarde, los comulgantes realizaron una procesión por las calles de la localidad que debía concluir en la propia Iglesia de Santa Lucía. Sin embargo, la procesión no terminó en el lugar esperado sino que fue disuelta en mitad del recorrido por la noticia de que el ejército rojo había cruzado el Ebro y se dirigía hacia Aragón. El grupo se disolvió y cada comulgante volvió a su casa con el fin de protegerse ante las amenazantes noticias de los combates. Efectivamente, ese mismo día, de madrugada, miles de soldados republicanos habían cruzado el Ebro en una maniobra inesperada que cogió por sorpresa a las tropas franquistas. Había comenzado, en ese instante, la larga y cruel batalla del Ebro.
Adjuntamos, junto a la imagen original, las siluetas numeradas con los nombres de las personas que han podido ser identificadas en la fotografía.
La segunda imagen fue tomada en 1941 y en ella aparece el grupo de alumnos con los que comenzaba la andadura del Colegio de Nuestra Señora del Pilar, en las aulas del Convento de Franciscanos. Este grupo de jóvenes, acompañados de sus profesores, entre los que encontramos al Director Don Marceliano Perez o Mosén Antonio del Cacho y Tiestos, inauguraba el curso de Bachillerato en el colegio. Era, además, el primer año de Educación Mixta.
Publicamos también, además de la imagen original, las siluetas numeradas con las que identificar a los protagonistas.
Imágenes cedidas por Valentín Catalán Salas