Propongo a los audio lectores de El Agitador Bajoaragonés la banda sonora que puede ser apta para un sábado de vermú torero.
El vermú torero de un sábado consiste en mezclar horario matinal con el vespertino y el nocturno. La motivación de echarse unos pinchos, vinos , cañas, chupito digestivo, tertulia con copazos varios, merienda cena y vuelta a los cubatas, y así ,te puedes plantar hasta el domingo en horario de salida de misa .
Una de mis zonas preferidas en Zaragoza para tomar unos vinos y empezar así esta penitencia de bares, tascas, pubs , discos, afters y camareros con buen fondo, sin que el bolsillo se resienta demasiado, es la calle Jordan de Urries. Esta calle oscura y estrecha, transcurra entre el principio de Don Jaime y Plaza Santa Marta.
Comenzando en Taberna Geppetto, con Samuel, socio de Eva y en la cocina Kiko, poeta rapero, descendiente de Caspe. Aquí un Tinto joven Tempore, los solomillitos de ibérico con patatas y ajetes, un plato que nunca defrauda, que permanece siempre en su carta y que cada vez que lo pruebas se reinventa. Todo Lo Que Nos Gusta Nos Va a Matar Mañana. Sidonie
Nos pasamos a la tasca de enfrente Bar La Viña. Este bar estuvo cerrado varios años, anteriormente era un bar de ambiente, y como tal , tenía su cuarto oscuro. Desde hace poco más de dos años, lo regenta un joven marroquí que fusiona el tapeo clásico como las papas bravas con salsa aragonesa, mejillones tigre, con los pinchos morunos. De vino pediremos un crianza Monasterio de las Viñas.
Justo al lado de la Viña, El Ángel Del Pincho, el cual ha pasado por varias manos. Ahora un par de socios jóvenes se han puesto a la mano de su barra. Carlos uno de sus socios, un tipo agradable al cual conocí por casualidad en otro tipo de jornadas, siempre le gusta proponer nuevos vinos tanto blancos como tintos, con preferencias en somontano. Tempuras japonesas, y empanadillas argentinas picantes adornan su pizarra. Dos tascas que congregan a un precio accesible tapas clásicas con recientes creaciones.
Aquí lo que suena es la fusión de la letra de Gato Perez; Gitanos y Morenos en las voces de la Pandilla Voladora ( Lichis, el Canijo, Jairo, Tomasito y Albert Pla )
Salimos de esta calle estrecha, dejando otras barras. Plantándonos delante del mostrador aceitoso, la clásica taberna El Lince. Clásica y con mucha solera en el transcurso de los años, que deleita el paladar con sus tapas vip, patatas rellenas y guardiaciviles picantes ( sardina de cubo, con una rodaja de tomate, pepinillo y picante, mucho picante ).
El vino aquí nos va a dar igual, casi mejor una cerveza de barril bien fría, para refrescarnos tras la ingesta picante. Ya metidos en faena, los vinos, cañas, banderillas y taburetes de vieja madera. Los desatados Supertramp con White Rabbit.
Nos despedimos de la Plaza Santa Marta por un cantón que da a la calle Mayor, dirección calle San Jorge. Estirar las piernas seguro que nos hace bien. Buscando el deleite de lo que sería una buen centro de embutidos para nada ibéricos, mejor de la tierra aragonesa.
L´ Albada, cuca tasca regentada por trovadores zufarienses ( Laury y Sergio ), junto a Pedro, persona noble en la barra. En esta tasca prima la verdadera cultura, música y gastronomía aragonesa del vermu. En L´Albada cualquier cosa es sabrosa, fresca, de temporada y de mercado de corto recorrido, excepto la cerveza Alhambra.
Aquí descubrí la seta Cantharellus cibarius ( rebozuelo ) guisado y acompañado de magras, el maridaje perfecto para la Alhambra. Aquí podría sonar cualquier grupo de rock folck Aragones. Al Igual que L Albada rescata el verdadero “entreplateo” aragones, me permito desatar en los platos a Fermin Muguruza y su “Zugarramurdin Akelarrea” para finalizar la jornada gastronómica.
La sesión tragona del medido día finaliza, pero no el vermú torero. Siempre está el gracioso amigo que necesita un digestivo y que en su bolsillo lleva un sobre de gaseosas El Tigre. Seguiremos con los cafés y los pertinentes copazos de sobremesa, cualquier bar entre la calle Alfonso y Puerta Cinegia, con sofás nos va bien, lo de menos es la música de fondo.
La tertulia a voces giradas como si estuviésemos solos en el local fondeará sobre a los diversos temas de actualidad: la República, el Clero, el Fondo Monetario Internacional, el Final de Campaña. Primero un fandango para la “modorra”. El Cabrero. Fandangos Republicanos
En la tertulia, tras copazos y digestivos, se va animando el cenáculo al igual que la música de este vermú torero
Llega el tiempo crítico, el reloj se ha parado y la noche se ha echado encima. Retirase ahora sería una victoria o quizás sería una derrota. La clave, un bocata de calamares con mucha salsa brava acompañada de una jarra de Calimocho. Lo clásico en Zaragoza sería ir al Calamar Bravo, pero no estamos en circunstancias de cruzarnos con manadas de señoras lacadas y con los morros rojos, respetables que aprovechan el sábado por la tarde a última hora para saquear las tiendas del centro . Corremos el riego que esta manada de compradoras compulsivas de bolso acolchado nos atropellen. Votamos a mano alzada para aposentar nuestro estómago y hacer algo de maseta en la barriga en el Burguer Paco. A estas horas somos todo amor, ya hemos limado las asperezas de la tertulia, y a todos nos gustan Los Ramones. Nos dirigimos al primer pub cercano, con las pistolas cargadas. Liaisons dangereuses – Los niños del parque
Más allá de la media noche, van cerrando los pub y bares. La ordenanza que regula los horarios de cierre ha hecho mucho daño a este tipo de jornadas toreras. Ya no quedan muchos lugares del circuito nocturno donde poder elegir con elegancia torera. Continuar la noche más allá de las 4.30, es una misión complicada, zonas como el Rollo, Zumalacárregui o Doctor Cerrada, templos musicales como La Sala en Bruto, DeVizio, KWM, Minimal, o el Zeppelin, cerraron.
No necesitamos ninguna educación.
No necesitamos ningún control del pensamiento.
No hay sarcasmo oscuro en el aula.
Profesor deje solos a los nińos ¡.Hey! ¡Maestro! ¡Déje a los nińos en paz!.
Remix, del sueco Eric Prydz. Versioneando a Pink Floyd
Llegadas a estas horas nos da igual el sitio, lo importante es que ninguno de los camaradas que empezó el vermu torero, abandone. Es hora de hacer piña.
Podemos elegir La Sala Lopez o La Sala Z. Esta vez nos decantaremos por La Sala Lopez, nos cae más a mano y evitamos los taxis. Nos tocara hacer fila. Da igual. La música no está mal, el ambiente hipster, mezclado con “cierrabares” como nosotros.
Los halcones no duermen esta noche, van dirección al este en busca del sol de la mañana. Estos hispter suenan en la Sala Lopez . Corizonas . The Falcon Sleeps Tonight.
A mí los Hispter me recuerdan siempre a Felipe Gonzalez y Alfonso Guerra con chaquetas de pana.
Nos encontramos en la hora clave de la supervivencia torera, el garito de moda cierra sus puertas, la banda torera se empieza a deshacer, algunos ya han caído antes del cierre. En la calle, las típicas películas al amanecer. El borracho que quiere montar en taxi en el coche de la policía local; el don Juan que va pidiendo fuego a cualquiera sea guapo o fea, alto o baja, rubia o moreno, solo le importa mojar; la pareja que se promete amor eterno, mientras se mete mano; el vecino que baja al perro porque no le dejamos dormir.
Entre todo este ganado de gatos locos, siempre atentos, están los cuellos altos. Los cuellos altos, ( da igual el sexo), son gente corriente, con su trabajo corriente, su hipoteca corriente, su ropa corriente, sus amigos corrientes, en fin, su vida corriente. Son parte de los cierra bares.
Estos están atentos a cualquier rumor de un nuevo after que este abierto de manera clandestina y que tenga algo de veracidad, ya que en el bolsillo solo quedan unas pocas monedas.
Los cuellos altos saben que siempre tienen el flotador de la tarjeta de crédito. Solo ellos se las pinta solos, para sin conocerse hacerse amigos de siempre entre sí mismos “ cuellos altos”, pero no más de 3 o 4 cuellos altos. Si el grupo fuese a más, no podrían compartir taxi. Ya saben a dónde van a dirigir sus últimos cartuchos. El propio taxista les ha dicho dónde está el ilegal After.
El último after tecno decente, clasista, pero decente, de Zaragoza, cerro poco más del 2009. Las leyes, la crisis y la presión policial,…, forzaron al cierre de un mítico club techno mañanero. La Jungla en la Plaza Santo Domingo. Antes cayeron otros, Kitsch, Overdose, Naranja Mecanica,… Underworld – Born Slippy Nuxx (Live 1998/1999 World Tour)
Los rayos de sol, ya pican en la piel pálida de la serpiente. Si fuese julio hasta las moscas nos seguirían. Es el fin del vermú torero. Sin dios, sin patria y sin dinero uno se dirige de la manera más elegante y señorial posible. Por supuesto con el cuello alto, con el cuello bien alto, dirección a casa.
Los huesos ya no dan más de sí. La gasolina se acabó y el carburador dejo de funcionar hace ya un rato. Los vaqueros pegajosos, las botas del color del asfalto, el olor a todo y a nada. Uno después de un vermú torero ya no es la misma persona. El mundo ha cambiado, el sol es diferente, la calles ya no son las mismas, el aire es incomparable, la ciudad esta irreconocible, tu casa es extraña y la cama te destierra.
En el recuerdo ya no queda nada, más que una boca como el estropajo, el estómago con remanentes, unos pulmones doblados, y un esqueleto oxidado. La duda se queda grabada, mientras das vueltas y vueltas en la cama. La decisión de sentarte en la taza del water puede ser la más adecuada. Llega la hora de purificarse. Mañana lunes será otro día.
Un admirable vermú, para un perfecto día. Perfect Day. Lou Reed. El video; BSO Trainspotting.
Miguel Ángel Insa
